Cada vez más, las tecnologías de la información se están ganando su espacio dentro del sistema sanitario, mejorando, por ejemplo, los controles y la seguridad en los tratamientos.

En este último caso, las tecnologías han entrado en el campo de la anticoagulación con el propósito de facilitar el acceso a los controles de las personas que tienen movilidad reducida o con problemas de horarios.

Esto se debe principalmente a que los anticoagulantes orales antivitamina K son un tipo de tratamiento que requiere de un control estricto, por lo que en muchos casos los pacientes deben desplazarse a los centros sanitarios para controlar su INR y ajustar así su dosis.

La nueva aplicación tecnológica ha permitido que un total de 1.253 pacientes anticoagulados del Departamento de Salud Clínico-Malvarrosa (Valencia) ya se hayan beneficiado de un control más ágil, seguro y fácil.

¿Cómo funciona?

Los usuarios pueden recibir, si así lo desean, la hoja de dosificación por correo electrónico o bien usar una plataforma online disponible en diferentes dispositivos (ordenador, móvil, tableta). Esto dinamiza la comunicación entre los profesionales sanitarios, los pacientes y sus familiares y facilita, a su vez, la entrega de los resultados de las pruebas para controlar y ajustar el tratamiento y hacer más amena la conciliación familiar y laboral de los pacientes y/o sus cuidadores.

Además, el Departamento de Salud Clínico-Malvarossa, con la colaboración del Colegio de Farmacéuticos de Valencia, ha impulsado un proyecto piloto que incluye la participación de profesionales del área para identificar precozmente las interacciones de los fármacos, ofrecer un horario más flexible para los controles y potenciar la atención farmacéutica.

Fuente: Consellería de Sanitat. Generalitat Valenciana