FEASAN insta a las autoridades sanitarias a unificar las medidas adoptadas ante el COVID-19 para los pacientes anticoagulados
1 abril, 2020
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FEASAN insta a las autoridades sanitarias a unificar las medidas adoptadas ante el COVID-19 para los pacientes anticoagulados
1 abril, 2020
Madrid, 1 de abril de 2020. La Federación Española de Asociaciones de Anticoagulados (FEASAN) celebra las medidas tomadas por la mayoría de las comunidades autónomas en aras de ofrecer la mejor atención sanitaria y preservar la salud de los pacientes anticoagulados que deben acudir a realizarse los controles de su tratamiento al centro de salud u hospital.
La pandemia actual causada por el Covid-19 afecta a miles de personas de más de 200 países. En la mayoría de los casos se trata de una enfermedad que cursa con una infección leve, aunque se muestra más grave en aquellos pacientes mayores de 60 años y que sufren de patologías previas, además de tener un impacto directo en la enfermedad cardiovascular (ECV).
En este sentido, estudios recientes han demostrado que los pacientes cardiovasculares, entre ellos las personas que están anticoaguladas, están más predispuestos a la infección por Covid-19 y a padecer un mayor riesgo de eventos adversos; además, también se ha visto que puede causar daño cardíaco en pacientes sin afección cardíaca. [i],[ii]
En España, alrededor de 1.000.000 personas viven anticoaguladas, lo que representa el 2% de la población de nuestro país. El perfil sociosanitario del paciente anticoagulado es, en su mayoría, el de una persona mayor (por encima de los 70 años) con patologías cardiacas y otras comorbilidades, por lo que presenta mayor riesgo ante el coronavirus. Sin embargo, y en tiempos de confinamiento absoluto, más de la mitad de los pacientes de nuestro país deben acudir regularmente a los centros sanitarios a realizarse controles de su tratamiento con Sintrom® o Aldocumar®.
Ante esta situación, sociedades científicas de cardiología, hematología y atención primaria, y también FEASAN han reaccionado estos días señalando la urgencia en aplicar medidas concretas desde las consejerías de salud para garantizar la seguridad de los pacientes que deben acudir a los centros a realizarse sus controles en el contexto de esta emergencia sanitaria.
“Si los mayores con enfermedades crónicas ya tenemos miedo a salir de casa para ir a la farmacia, la preocupación por tener que ir a un centro de salud o un hospital a hacerse el control es mucho mayor. Es importante informar a los pacientes previamente para tranquilizarles. Por supuesto, aplaudimos las medidas extraordinarias que se están tomando desde Sanidad, pero deben aplicarse en toda España sea cual sea el lugar, esté más afectado o no por el coronavirus”, destaca el presidente de FEASAN y también paciente, Rafael Martínez.
Algunas de las medidas extraordinarias más destacables que se están aplicando y que FEASAN compartió hace días con las autoridades sanitarias autonómicas y se espera que se vayan implementando de forma homogénea en los distintos territorios:
1. Informar a los pacientes anticoagulados sobre las pautas que se van a tomar para su control.
Debemos evitar, en la medida de lo posible, que acudan a los servicios de salud sino es estrictamente necesario, por ello mantenerlos bien informados evitará que se preocupen innecesariamente y que actúen de la forma más correcta para proteger su salud. Ahora es clave que sepan si deben acudir o no al control, si se han habilitado unas zonas protegidas, si le han cambiado el horario de control, cómo va a recibir la pauta, qué deben hacer ante una posible complicación, etc.
2. Garantizar la seguridad del paciente en el acceso al control del INR en el centro sanitario.
En este aspecto son diferentes las medidas que se deben adoptar. En primer lugar, es necesario que los centros responsables de realizar la monitorización del INR garanticen el aislamiento de las zonas de control con respecto al resto de zonas con afluencia de pacientes, especialmente respiratorios. Deberán distanciar las visitas para que no confluyan diferentes pacientes y garantizar las medidas higiénicas de protección tanto para el profesional sanitario como para el propio paciente. Para los pacientes más estables en su tratamiento se recomienda espaciar la visita de control unas semanas según el criterio clínico. Para los que deben hacerse el control, sí o sí, y la infraestructura del centro no permita aislar las zonas de otros pacientes se podrá realizar una visita domiciliaria y telefónica.
Mediante esta fórmula se reduce significativamente el riesgo de contagio, tanto para el paciente como para los profesionales sanitarios y, por extensión, para la población en general.
3. Facilitar el acceso a los anticoagulantes orales de acción directa (ACOD) de forma provisional.
Si queremos minimizar el riesgo para estos pacientes expertos y pacientes han exigido a las autoridades sanitarias la ampliación de la financiación de los ACOD a los pacientes con fibrilación auricular no valvular (FANV) que deban iniciar el tratamiento anticoagulante o que actualmente se encuentran en tratamiento con AVK pero que presentan un INR inestable y fuera de rango. Dicha financiación se justifica porque el confinamiento de los pacientes y, por lo tanto, “la imposibilidad de acceso al control del INR convencional” es una de las situaciones descritas en el Informe de Posicionamiento Terapéutico de los ACOD como criterio de elección de estos tratamientos.
4. Asegurar la dispensación de la medicación con visado de inspección de forma automática.
La situación actual exige medidas excepcionales temporales, también en procesos administrativos como la aprobación del visado de inspección de tratamientos como los ACOD. Eliminar el visado durante el periodo de alarma y sus posibles prórrogas o facilitar la aprobación automática de esos visados a aquellos pacientes que todavía siguen en receta manual de ACOD para no tener que desplazarse hasta el Centro de Salud o las Inspecciones Médicas del Área correspondiente evitará al paciente la exposición a un riesgo innecesario.
“No es momento de diferencias si no de sumar esfuerzos y garantizar la máxima seguridad sanitaria para quienes somos más vulnerables ante el virus, por eso apelamos a la equidad territorial para que las medidas extraordinarias sean para todos”, añade el presidente de FEASAN. En este sentido, FEASAN ha mostrado su desacuerdo ante la Orden SND/266/2020, de 19 de marzo, por la que se establecen determinadas medidas para asegurar el acceso a la prestación farmacéutica del Sistema Nacional de Salud al colectivo de los Regímenes Especiales de la Seguridad Social. Esta orden elimina los visados para los funcionarios, una medida “que muestra la inequidad que el propio Ministerio de Sanidad fomenta con algunas decisiones”, añade Martinez. En este sentido y tratando de equiparar los derechos de los pacientes anticoagulados de nuestro país, desde FEASAN se insta al Ministerio de Sanidad a que equipare dichas medidas a las del resto de pacientes.
Aun así, el presidente de FEASAN señala que, “como entidad representante de los pacientes, reafirmamos nuestro compromiso con las instituciones sanitarias de nuestro país, ofreciendo como siempre nuestra colaboración y ayuda para todo lo que esté en nuestras manos. Porque seremos todos juntos los que venceremos esta pandemia”.
[i] Li B, Yang J, Zhao F et al. Prevalence and impact of cardiovascular metabolic diseases on COVID-19 in China. Clin Res Cardiol 2020.
[ii] Zheng YY, Ma YT, Zhang JY, Xie X. COVID-19 and the cardiovascular system. Nat Rev Cardiol 2020.
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